Por Aldous Huxley, texto y traducción Eros Quintero
Philosopia Perennis o Filosofía Perenne es un término acuñado por Gottfried Leibniz (1646-1716), pero el concepto es Inmemorial y universal: Es la metafísica que reconoce una Divina Realidad en el mundo de las cosas, vidas y mentes.
Pueden hallarse rudimentos de la Filosofía Perenne en las tradiciones de los pueblos primitivos en todas las regiones del mundo, y en sus formas plenamente desarrolladas tiene su lugar en cada una de las religiones superiores.
Huxley nos dice que el conocimiento es una función del Ser. Cuando hay un cambio en el Ser del conociente, hay un cambio correspondiente en la naturaleza y la cuantía del conocimiento.
La Filosofía Perenne se ocupa principalmente de la Realidad Una Divina, inherente al mundo múltiple de las cosas, vidas y mentes. Pero la naturaleza de esta realidad es tal que no puede ser directa o aprehendida, sino por aquellos que han decidido cumplir ciertas condiciones haciéndose amantes, puros de corazón y pobres de espíritu.
¿Por qué ha de ser así? No lo sabemos.
Sólo haciendo experimentos físicos podemos descubrir la naturaleza íntima de la materia y su poder latente. Y sólo haciendo experimentos psicológicos y morales podemos descubrir la naturaleza íntima del espíritu y su poder latente en las circunstancias ordinarias de la vida sensual media. Este poder continúa latente, no manifestado. Si queremos despertarlo, debemos cumplir ciertas condiciones y obedecer ciertas reglas, cuya validez ha demostrado empíricamente la experiencia.
Huxley nos propone la tentativa para elaborar un sistema de TEOLOGÍA EMPÍRICA, compilando los escritos de primera mano que fueron resultado de una penetración inmediata en la Realidad Última, principalmente por «santos», «profetas», «sabios» o «iluminados»; tales escritos son considerados por su importancia para ilustrar dicha filosofía, pero también por su belleza y memorabilidad.
Uno de los factores clave de esta teoría es la forma en que Huxley vincula la experiencia visionaria con la experiencia estética y la consciencia mística, formando una especie de continuum trascendente que conforma la estructura medular de su teoría.
Dicho continuum comienza con la experiencia estética; cuando esta crece en intensidad puede convertirse en una experiencia visionaria. Finalmente cuando la experiencia visionaria se vuelve más poderosa o incontenible para el Yo, ocurre el estado de consciencia mística.
Esta consciencia se caracteriza por un profundo sentido de unidad entre el individuo y el resto de la creación.
Gracias a esta trascendencia de tiempo, espacio y culturalidad, la consciencia mística puede considerarse como un fenómeno de naturaleza transpersonal, y por tanto el punto más alto de la Filosofía Perenne.
Ilustración de portada por Pedro Correa https://www.mache.digital/series/2019/3/15/pedro-corra?fbclid=IwAR2nVRZgqVL52VIjfIWzM-72-1nh1cb2GeBFjicNHPLXD5egfF0kWGUNwxY
Write a comment
You must be logged in to post a comment.